Después de comprobar que una clase no es un buen sitio para que crezcan las plantas hemos intentado comprobar si un invernadero les ofrece mejores condiciones. Así que hemos vuelto a sembrar:
Comprobamos así que cada planta tiene semillas diferentes. Algunas se comen, como garbanzos o lentejas y otras están dentro de los frutos:
Y ahora a esperar...
Ahora nos planteamos otra forma de sembrar:
Si metemos nuestra pequeña patata en tierra no veremos lo que sucede pero si la metemos con sus raíces en agua sí lo podremos ir viendo.
Pero surge la duda: "¿seño, de verdad va a chupar el agua?
Para eso vamos a realizar otra experiencia.
Cogeremos una pequeña flor blanca y la meteremos en colorante. Comprobaremos como dentro de unos días ha chupado el líquido y se pondrá del color del colorante. Eso le ocurrirá a la patata.
Como mis niños y niñas son muy impacientes (y yo también jeje) lo vamos a hacer un poco más acelerado.
Cogemos papel absorbente, pintamos una flor y le metemos el piquito de abajo en el colorante como si fueran las raíces. ¿Qué sucede?
Pues que la flor ha chupado el líquido...
¡Lo hemos conseguido!
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